Entender al bebé por sus expresiones corporales
Cuando llega a casa un recién nacido todo es ilusión y felicidad por incorporar a un nuevo miembro en nuestra familia. En esta primera etapa de vida, los bebés no pueden comunicarse con nosotros verbalmente para decirnos cuáles son sus necesidades en un momento determinado. Por eso, entender al bebé por sus expresiones corporales va a resultar indispensable para que se sienta seguro, protegido y cuidado. Además, el vínculo familiar va a verse reforzado.
Todos los recién nacidos realizan una serie de acciones de manera instintiva: llevarse las manos a la boca, mover y estirar sus piernas, abrir los ojos… Estas son maneras de comunicarse con lo que les rodea cuando aún no tienen la posibilidad de hablar.
La manera en que mueve su cuerpo, los gestos faciales y los sonidos que emite tu bebé va a darte muchas pistas sobre qué es lo que le sucede o necesita. Por eso es importante que sepas interpretarlo de manera correcta.
¿Cuáles son los gestos más comunes?
- Dolor: Suele venir acompañado de un llanto intenso y mantiene sus ojitos cerrados. Si te detienes a ver su cara, vas a poder apreciar que se encuentra tensa, tanto en frente, ojos y labios. Por otro lado, el cuerpo va a tender a mantenerse de manera rígida, incluso llegando a arquear su espalda. Otra señal de dolor es que mantenga sus puños cerrados durante un largo periodo de tiempo.
- Sueño: Los gestos del bebé para interpretar que tiene sueño son fácilmente reconocibles, ya que se asemejan mucho a los que los adultos utilizamos. Bostezar o que esté frotando sus ojos es un claro indicativo de que necesita dormir. En bebés es incluso normal que lloren para decirnos que tienen sueño: no es un llanto tan intenso como cuando sienten dolor aunque, si no conseguimos que se duerman, puede empezar a intensificarse. Frotar su cara contra tu pecho también es un signo de cansancio y sueño.
- Hambre: Si ves que el bebé abre mucho la boca o comienza a llevar sus manitas hacia ella, es probable que tenga hambre. Algo que vas a reconocer fácilmente y que indica que llegó la hora de comer es que tu bebé comience a mover su cabeza de un lado hacia otro y coloque su boca como si estuviera buscando tu pecho. También el llanto va a ser un recurso para llamar tu atención cuando tiene hambre.
El llanto: indicador de emociones negativas
Además de lo anterior, el bebé va a utilizar el llanto cuando está enfadado, triste o siente miedo. Por eso, a los padres y madres, nos resulta muy confuso saber a qué se debe realmente, ya que llorar es el modo que más utilizan para comunicarse con nosotros. El desarrollo neurológico de tu bebé comienza desde su nacimiento, cuando sólo es capaz realizar respuestas de forma refleja (aunque su cerebro esté repleto de millones de neuronas que realizan conexiones entre ellas) y el llanto forma parte de él.
Cuando los bebés ya han cumplido algunos meses de vida, algo que puede darnos pistas es conocer qué es lo que estaba sucediendo entorno al bebé antes de que comenzara a llorar. Por ejemplo:
- ¿Ha comida ya? ¿Tomó suficiente comida?
- ¿Hay algo que pueda estar estresándole? Luz demasiado intensa, sonidos demasiado fuertes a su alrededor, temperatura del ambiente, etc.
Otra de las cuestiones que debes tener en cuenta es el propio carácter de tu hijo o hija, por lo que compararle con otros bebés es un gran error en el que puedes caer. Cada bebé es un mundo y no tiene porque comportarse exactamente igual a otro, aunque muchos gestos y expresiones sean comunes a todos ellos.
Conocer lo que le agrada o desagrada va a ayudarte mucho a la hora de prevenir “berrinches” innecesarios o que sufra sin necesidad. Obsérvale detenidamente y encuentra los patrones de comportamiento de tu bebé.
Al final se trata de que desarrolles tu propio instinto: va a ser el que te conecte con tu bebé. Si quieres saber más acerca de cómo desarrollar los vínculos con tu bebé desde el primer día, no dejes de leer nuestra Guía para padres primerizos.
Esperamos haberos ayudado a interpretar más claramente las emociones y el lenguaje corporal de vuestro bebé a través de este blog.
¡Nos vemos en BabyBrain!